PLANIFICACION DE FOTOS CON LA LUNA
Hace ya algún tiempo os hablamos de la planificación de fotos con el Sol. ¿Cómo? ¿No te acuerdas? Te dejamos el linkaquío busca el artículo en el blog de Foto Ruano.
Esta vez hemos vuelto para hablaros del otro astro que nos rodea, la Luna.
Somos muchos los que sufrimos de selenofilia, vamos que estamos obsesionados con la Luna. Por eso os daremos nuestros mejores consejos para fotografiarla junto con los edificios, personas o aquello que más os guste.
Muchas veces nos centramos en Luna llena, pero a lo largo del mes, podemos fotografiar diferentes fases de la Luna, jugando con la parte iluminada, la zona en oscuridad, la iluminación de la escena... así que no te cierres a solo esos 2 o 3 días de luna llena.
VAMOS A CONOCER LA LUNA
¿Hasta qué punto conoces la Luna? Vamos primero a ver ciertos detalles que tenemos que tener en cuenta antes de fotografiarla.
La Luna es nuestro único satélite natural y tiene una órbita elíptica, acercándose y alejándose de la Tierra en diferentes momentos a lo largo del mes.
Cuando la Luna está en su punto más cercano, se denomina perigeo y cuando está en el más lejano, apogeo.
Dependiendo de si está en el apogeo o perigeo, la podemos observar con una diferencia de tamaño de hasta el 15% e incluso un 30% más brillante.
Cuando la fase de la Luna es Luna llena y nuestro satélite está en perigeo se la conoce como “Súper Luna”. Este año 2023 podremos disfrutar de 3 Súper Lunas, los meses de Julio y Agosto.
Por desgracia muchos medios de comunicación, mal llaman “Súper Lunas” a prácticamente todas las lunas llenas, incluso revistas de, se supone, gran prestigio científico lo hacen. Pero los querremos igualmente.
Este fenómeno no es solo algo curioso, sino que a la hora de hacer la foto va a afectar a los parámetros que usemos sobre todo si tenemos poca luz en la escena.
Como el Sol, la Luna sale por el Este y se pone por el Oeste, pero no exactamente, puede ser más noreste o sureste y noroeste o suroeste. Muchos fotógrafos preguntan o les preguntan eso de; ¿me puedes decir dónde has hecho la foto? Para ir yo mañana. Cada día la Luna sale por un punto del horizonte distinto y puede llegar a variar bastante de un día a otro, no como el Sol que de un día a otro, el cambio es de apenas unos grados. Por este motivo, el sitio de hoy no será el mismo de mañana y mucho menos para la próxima Luna llena. De ahí la importancia de planificar las fotos.
PARÁMETROS PARA ESTE TIPO DE FOTOGRAFÍAS
La Luna es una fuente de luz muy brillante. Ella por sí misma no emite luz, como el Sol, pero si el reflejo de la luz de este.
Por regla general, haremos disparos “rápidos”, diafragmas lo más abiertos posibles o cerrando un par de pasos respecto a la apertura máxima, para buscar el punto dulce de nuestro objetivo. Sensibilidad ISO lo más baja posible, siempre conociendo los límites de nuestro equipo en cuanto a ruido. Nosotros aconsejamos no pasar de 3200, pero esto no quiere decir que puedas llegar a usar ISOs más altos en función de las circunstancias y si tu equipo te lo permite.
Y, por último, respecto a la velocidad, dependiendo de la luz que tengamos podemos llegar a un máximo de 2 segundos (con más tiempo la Luna ya saldría “movida”) pero lo dicho, siempre intentaremos disparos rápidos (1/20, 1/100, 1/400 etc.) para congelar el instante y más si nuestro hito es una persona o un objeto con movimiento.
Al igual que para el Sol, no hay una varita mágica que nos diga qué parámetros exactos usar, todo va a depender de las condiciones de luz, la distancia al sujeto, el equipo que tengamos…
TIPOS DE FOTOGRAFIA CON LA LUNA
La Luna siempre ha estado rodeada de un halo de misterio… debe ser porque siempre sale por la noche. ¡Error! Solemos asociar la Luna a la noche y no siempre es así. Durante las diferentes fases podemos observar y fotografiar la luna a casi cualquier hora del día o de la noche, aunque hacerla coincidir con un hito cerca del horizonte, se hace más complicado en unas fases u otras por la luz o falta de ella.
Por ejemplo, cuando está en fase Cuarto Menguante, sale bien entrada la noche por lo que tendremos ausencia de luz del sol, y se pone de día con mucha luz haciendo que se vea muy clarita si conseguimos verla cerca del horizonte.
Vamos a ver varios ejemplos y tipos de fotografías.
Luz de día.
Hora Dorada.
Hora azul
Crepúsculo naútico
De noche
Con iluminación externa
Lunas Cenicientas
Siluetas
EL EQUIPO NECESARIO Y CONSEJOS PARA REALIZAR ESTAS FOTOGRAFIAS
Vamos con lo que a la mayoría nos pregunta a la hora de empezar con estas fotografías.
¿Qué necesito para poder fotografiar la Luna con edificios, personas u otros hitos?
Aplicación para calcular la salida o la puesta. En este caso nosotros recomendamos Photopills y/o PlanIt Pro, que son las aplicaciones que enseñamos a usar en nuestros talleres de planificación y con las que colaboramos.
Nos permiten planificar las fotografías sabiendo el sitio y la hora exacta para conseguir esa foto deseada.
La lente o zoom. Cuanto más larga sea la focal del objetivo que tenemos, mejores resultados obtendremos. Recomendamos mínimo 200mm, pero no quiere decir que si no tienes un tele largo no puedes hacer este tipo de fotos. Puedes, lo único que tocará recortar más (perdiendo calidad) o tendrás que cambiar la composición de la fotografía incluyendo más paisaje, skyline, cielo…
Es muy importante plantearse bien la fotografía deseada, porque no es lo mismo una silueta de una persona con la Luna a 200 metros que a 800 metros o 1,5 km. Cuanto más cerca estemos del “muñeco”, más pequeña será la Luna en relación a él.
Por ejemplo, la silueta de este Yogi.
El modelo medirá alrededor de 1,70 m. Si nos ponemos a 100 metros de él, el diámetro de la Luna será aproximadamente de 1 metro. Si duplicamos nuestra distancia, la Luna será de 2 metros. A 400 metros, tendremos una Luna de 4m, a 1km una Luna de 10m y así sucesivamente.
Nosotros empezamos a unos 500 metros y según fue elevándose la Luna, fuimos bajando y acercándonos hasta los 350 metros aproximadamente manteniendo al modelo y la Luna alineados y con un tamaño aparente de la Luna, acorde a lo que queríamos: una Luna grande con él dentro.
Esto es sumamente importante ya que compositivamente la foto a una distancia u otra es muy diferente.
Trípode. Un trípode robusto y estable, que aguante el peso del equipo. Al final, son fotos al aire libre donde puede haber viento y, sobre todo, los equipos utilizados son pesados. Teleobjetivo más cámara pesan varios kilos.
Disparador remoto. Con su uso evitaremos trepidaciones al evitar tocar la cámara y que las fotos salgan movidas. Muchos pensareis que es posible usar el temporizador de la cámara, pero a la velocidad que se mueve la Luna, si disparas a 2 o 10 segundos de retardo, la distancia recorrida por la Luna puede hacer que te quedes sin la foto que querías. Si no nos crees, prueba a encuadrar a la Luna a la máxima focal que tengas y haz zoom digital en la cámara al máximo posible. En la pantalla verás cómo de rápido se mueve. ¡¡Pruébalo y nos cuentas!!
Linterna o frontal. Es importante, ya que, cuándo vas a hacer este tipo de fotos o empiezan de día y acaban de noche o viceversa.
LOS CONSEJOS MÁS IMPORTANTES QUE OS PODEMOS DAR
Aprovechad todas la Lunas. No sólo salgas el día de Luna llena, disfruta de los días anteriores, de los posteriores, de las Lunas cenicientas…
El estado del cielo. No tires la toalla si hay nubes o incluso algo de calima. La ley de Murphy dice que si tienes una salida de Luna llena planificada habrá nubes… jajaja, no dice eso, pero para los selenófilos se acerca. En serio, son muchas las fotos que dábamos por perdidas por las nubes y en el último momento las conseguimos al abrirse un claro. Con algo de calima (no mucha, entendednos) la Luna puede salir más roja de lo habitual, dándonos una foto cuanto menos diferente y original. Lo importante es estar ahí, la foto es la disculpa y seguro que desde el sofá de casa no consigues la foto.
Imita lo que te guste. A la hora de empezar, hacer esa foto que ya viste a alguien, es la mejor manera de aprender. Tratar de hacerla por ti mismo e incluso de mejorarla o hacer tu versión hará que cojas experiencia y aprendas a resolver los posibles errores que todos cometemos al principio.
Seguridad. Suena lógico, pero no siempre lo hacemos. Avisar de a dónde vamos o incluso ir con alguien y compartir la experiencia, es quizás lo más importante. No dejamos de ir a sitios que pueden ser en medio del campo donde podemos tener la mala suerte de torcernos un tobillo o incluso cosas peores.
Y recordad siempre: lo importante es participar. Hemos venido a jugar, ¿no?