Es ya conocido, pues así lo dicen las especificaciones, que este objetivo
RF 600 mm F4 es muy ligero y con un sistema de estabilización de ultima generación. Con estas dos cualidades ya conocidas, me dispuse a hacer una prueba, disparando a mano y eligiendo como sujeto buitres en vuelo sobre las hoces del río Duratón.
Para centrarnos en lo que realmente probé, mi reto era doble:
- Comprobar que el seguimiento del autofoco era efectivo y en especial que el foco continuaba en el sujeto elegido y no se desviaba a otros sujetos o motivos (importante en el caso de aves en vuelo porque a veces el foco se puede ir a sujetos que aparecen detrás o delante, o bien a los árboles o rocas del fondo)
- Comprobar la efectividad del ajuste de “detección de ojos” y del enfoque en la cara de las aves (importante si queremos que el ave en vuelo nos aparezca con la cabeza enfocada)
Y en la sesión realizada me propuse disparar en todas las situaciones posibles que me permitiera valorar las prestaciones de la cámara R5 y del objetivo RF 600 mm F4. Disparando a los buitres sobre cielo azul, sobre fondo de árboles, sobre fondo de rocas, haciendo seguimiento en las que incluía sujetos varios como piragüistas, ramas y árboles, rocas y otros obstáculos. Los resultados fueron sorprendentes. Muy por encima de mis expectativas.
He elegido 4 fotografías para así mostrar aquello de una imagen vale más que mil palabras:
Foto 1
Seguimiento al ojo y, aún con el buitre llenando totalmente el encuadre, el ojo y la cabeza permanecen enfocados
Foto 2
Siguiendo el ave, al pasar justo por encima de un grupo de piragüistas, el autofoco continuó activo en el ave y no perdió ni un momento la silueta del ave en vuelo
Foto 3
En vuelo rápido y con fondo oscuro, el seguimiento del enfoque funcionó de maravilla como se ve en foto donde se ve nítidamente la cabeza del buitre
Foto 4
El reto más difícil: Las fotografías en vuelo con fondos rocosos y donde es difícil obtener fotos en vuelo nítidas. Aquí el tándem R5 y RF 600 sacaron matricula de honor.
Los amantes de la fauna en acción, de las aves en vuelo y sobre todo de las fotos de acción, tienen en este objetivo el aliado perfecto. Si además de esto, le sumamos las extraordinarias prestaciones de la cámara Canon R5, conseguiremos un gran salto adelante en nuestros retos como fotógrafos de acción y fotógrafos de naturaleza.
Por Miguel A. Pedrera